El Supremo desarma a Harry y le deja a la puerta de la cárcel

La sentencia de dos años y nueve meses de prisión, más una idemnización al Racing de 216.400, con la que la Audiencia Provincial de Cantabria había castigado a Ángel Lavín, Harry, por un delito de istración desleal durante su periplo como presidente del Racing ya es firme. El Tribunal Supremo, que ya había initido en diciembre del año pasado un primer recurso del de Suances, que presentó un 'Incidente de nulidad de actuaciones' que ha llevado a que, de nuevo, el Supremo haya tenido que pronunciarse. Y lo ha hecho en el mismo sentido: initir el desesperado recurso de casación que presentaron los representantes legales de Harry. La sentencia ya es firme y deberá cumplirse de inmediato. En cuestión de semanas, probablemente. Aún en el caso de que decidiera gastar una última bala con un recurso de amparo al Tribunal Constitucional, que se antoja otro fracaso seguro, su presentación no paralizaría la ejecución de la pena ahora ya firme. Esperaría en prisión la resolución del Constitucional.

Harry desacreditó desde el principio la estrategia legal orquestada en 2012 por Manolo Higuera, entonces presidente de la Asociación de exjugadores del Racing, y más tarde presidente del club. Ridiculizó sus argumentos y le acusó de pretender dar pena. Sin embargo, Higuera (el Racing no es parte en este proceso) ha resuelto por goleada el duelo de expresidentes: convenció con sus argumentos primero al juzgado de instrucción, luego al Juzgado de lo Penal nº1 de Santander (tres años y medio de prisión), a la Audiencia Provincial (confirmó los delitos, aunque rebajó la pena por dilaciones en el proceso), y, por fin, al Tribunal Supremo. Higuera 4 - Harry 0.

Más esperanzas de eludir la entrada en prisión puede tener Francisco Pernía, máximo dirigente racinguista entre 2006 y 2011 y el responsable de que le sucediera harry en el cargo, ya que el Bufete Broseta, actual representante legal del de Cóbreces, sí ha conseguido que el Tribunal Supremo itiera a trámite el recurso que presentó contra la condena, cuatro años de prisión y 127.357,84 euros de indemnización que recibió en la Audiencia Provincial de Cantabria, que creyó ver apropiación indebida y istración desleal en su paso por la poltrona de El Sardinero. El próximo 6 de julio se reunirá la sala del Supremo para tomar una decisión al respecto.