Adama, el especialista como solución o 'problema'
En los últimos partidos, el Barça ha abusado de llevar el juego a la zona del extremo, lo que convierte en previsible al jugador y al equipo.
Después de un inicio espectacular por lo inesperado, con dos asistencias en sus dos primeros partidos (Atlético y Espanyol) y un despliegue fabuloso en Nápoles, donde asistió a Alba en el 0-1 y a Aubameyang en el 1-4, Adama lleva tres partidos sin hacer números con el Barça. El club elaboró un informe elogioso sobre su actuación ante el Galatasaray. Destacó que tuvo un 87,5% de acierto en el regate y que dio hasta ocho centros durante el partido. Pero como bien precisó el marcador, ninguno terminó en gol.
El fútbol de Adama, tiene la ventaja del desequilibrio. Pero también puede terminar por condicionar demasiado el juego de su equipo. Cuando un futbolista tiene ese desequilibrio, el equipo siente la tentación en ocasiones de terminar orientando ahí todas las jugadas. Eso convirtió en previsible el juego del Barça contra el Galatasaray, que acabó llevándolo a ese juego. Xavi deberá evitar esa sensación para que Adama mezcle su juego, no acabe siempre la acción y siga siendo una sorpresa y una solución, no un ‘problema’.
