El Madrid se riló ante el Betis de Isco
Bajonazo para el Madrid en Heliópolis, que todavía es el nombre del barrio donde mora el Betis aunque su campo ya no se llame así. Después de unos partidos en los que parecía haberse resuelto la descompensación ataque-defensa, con una mayor contribución al oscuro esfuerzo común por parte de las estrellas, ayer todo se fue al traste. Una buena salida, un bonito gol, y punto final. Eso fue el Madrid. Luego bajó el ritmo y el trote constante del Betis, muy bien llevado por un Isco definitivamente renacido, le superó. Y así fue hasta el final, incluso después de llegado el 2-1, que obligaba a los de Ancelotti, pero cayeron sin rebeldía.
Juega bien este Betis si se le deja. Barre estupendamente Johnny Cardoso, Isco la esconde, Antony y el joven Jesús Rodríguez amenazan por las bandas y Cucho incordia una barbaridad arriba. En suma, es demasiado equipo para darle por vencido con un gol conseguido a los nueve minutos. Un córner muy bien sacado por Isco que cabeceó Cardoso, mal vigilado, y un penalti un poco bruto de Rüdiger a Jesús Rodríguez voltearon el marcador. Y fue entonces cuando se vio lo peor del Madrid, que no tuvo energía ni juego para siquiera complicarle el final del partido al Betis. Los cambios no le reactivaron en absoluto.
En el último tramo entró Endrick por Mbappé, que hizo un flojo partido si exceptuamos el inicio, en el que estuvo en el origen de la jugada del gol. El joven brasileño mostró movilidad y picante, aunque esta vez no acertó en el remate. Pero la gran decepción fue Güler, que falló casi cada balón que pasó por sus botas. Ahora mismo es un jugador desinflado. Por lo demás, se notó la ausencia de Bellingham, que ayer completó su sanción liguera por el ‘fuck y lo que siga’ pero tampoco estará el martes ante el Atlético por acumulación de tarjetas europeas. El consuelo para Ancelotti es que sí da por seguro el regreso de Valverde.
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