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El ex jefe de PlayStation confirma que jugó al multijugador de The Last of Us pero que era incompatible con Intergalactic
Shuhei Yoshida lo define como “genial”, pero Bungie hizo ver al estudio californiano las implicaciones de lo que querían hacer.
Las dos horas de entrevista concedidas por Shuhei Yoshida a Colin Moriarty en su podcast Sacred Symbols, han dado para mucho. Ya retirado, el ex-presidente de PlayStation Studios ha hablado en detalle y con candidez de varios aspectos en su larga trayectoria en la compañía, de la que tiene mucho que decir, habiendo sido uno de los primeros integrantes de Sony Computer Entertainment que crearía la PlayStation original y el fenómeno a su alrededor. Buena parte de la entrevista ha ido centrada al pasado más reciente: qué pasó con Japan Studios, From Software y las circunstancias de varios proyectos internos durante su etapa. Uno de los nombres comentados fue Factions, el ambicioso multijugador independiente que Naughty Dog estaba preparando para The Last of Us 2 y que fue cancelado.
Tal y como explica Yoshida, el equipo californiano deseaba hacerlo y tenía planes ambiciosos para colocarlo en el espacio de los Juegos como Servicio. El multijugador de The Last of Us había sido bastante celebrado por los aficionados y la base jugable de acción y movimiento de la segunda parte prometían ser unos cimientos sólidos para un multijugador más ambicioso. Esta vez no se quería hacer sólo un “modo multijugador” sino un título con identidad propia que pudiera competir en uno de los espacios más competitvos de la industria, lo que implica no sólo un desarrollo inicial sino un desarrollo continuado.
El ejecutivo confirma además que pudo probarlo, definiéndolo de “genial”, pero el problema llegó cuando representantes de Naughty Dog se sentaron junto a otros de Bungie. Sony había comprado a los creadores de Halo y Destiny no sólo por sus capacidades de producción, sino también por su dilatada experiencia haciendo juegos multijugador y de servicio, con la idea de que ese conocimiento se propagara al resto de los estudios internos. Después de esas charlas y de tener un conocimiento de primera mano de lo que implicaba estar y competir en ese espacio, el estudio liderado por Neil Druckmann llegó a la conclusión de que sus planes con Factions les impediría desarrollar su nuevo proyecto: Intergalactic: The Heretic Prophet. Fue una “falta de previsión”, se lamentaba el kiotense.
Hay quien piensa que Naughty Dog podría haber sacado lo que tenían para convertirlo en un multijugador más al uso y darle al título una modalidad de juego que la primera parte sí tenía, sin las ambiciones GaaS. Pero cambiar la dirección de un desarrollo no es tan fácil como meter tijera y recortar lo que sobre. En cualquier caso, parece que Factions seguirá durmiendo el sueño de los justos y habrá que conformarse, como con tantas otras cosas, con lo que pudo ser y no fue.
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