El Barça se da un homenaje de despedida en el Palau
El choque empezó con casi una hora de retraso por culpa de accidentado viaje del Villa de Aranda, que llegó en varios taxis.
El último partido del Barça en el Palau empezó con casi una hora de retraso y alargó en exceso el día de las despedidas, nada menos que diez (por lo menos). Y luego el recibimiento del título de Liga con una gala que intentó agradar a los presentes. El Villa de Aranda fue el invitado de excepción, que bastante hizo con llegar, porque su viaje desde Burgos fue accidentado y tuvo que aterrizar en varios taxis: 45-27 (23-15).
Al Barça aún le quedan por lo menos cuatro paridos más, que pueden ser seis si disputa la final de la Copa del Rey. Es decir, le quedan dos títulos más en juego, porque cierra la temporada en Alemania peleando por la Champions. Pero oficialmente la fiesta ha sido hoy.
Ortega descartó a Nielsen, Cikusa y Mem para este partido, que no tuvo historia, que fue de guante blanco, en que el pivote arandino Roganovs destacó ganándose la posición entre la defensa azulgrana y volver a casa con ocho goles, casi un tercio de todo su equipo.