El Barça cumple con su obligación de estar en la final

Se cumplió lo sabido de antemano, que el Barça iba a arrollar al Bada Huesca en su semifinal copera en el Artaleku de Irún, y que era la despedida ideal de esta temporada para el cuadro oscense, que no estaba obligado a más que lo que le dieran las fuerzas: 28-43 (13-22). El Barça cumple con su obligación de estar en su duodécima final consecutiva.

Se podría decir que no hubo partido, que Ortega cambió a muchos jugadores (menos a Wanne) en el Barça y que no exprimió a los suyos para ganar por 15 tantos. Pero siempre hay otras perspectivas, como el gran trabajo exhibido por el central Miguel Malo, reivindicándose en el Bada Huesca en su condición de motor, asistente y especialistas en tirar penaltis ante porteros de reconocida calidad. Fue elegido el mejor del partido.

El Bada posiblemente disfrutó en el encuentro porque plantó cara a su nivel, y por segundo partido consecutivo colocó en evidencia el tiempo muerto que solicitó Ortega, los dos a quince segundos del descanso: contra el Valladolid perdieron la posesión; ante el Huesca no llegaron a lanzar. Se verá si a la tercera le sale bien.

En la defensa azulgrana Carlsbogard gana protagonismo, a la vez que lo pierde Petrus, que abandona el Barça en ocho días. El brasileño acabó el encuentro con dos exclusiones, lo que no es una buena noticia pensado en la Final Four.