A Primera se va por Burgos
Un triunfo del Levante y un empate de Mirandés o Elche devolvería al conjunto granota a la máxima categoría en El Plantío.
El Levante, como dijo Julián Calero, afronta su propia final de la Champions en El Plantío. En juego no hay un título europeo ni los focos del planeta fútbol, sino un billete a Primera División. Una victoria frente al Burgos, acompañado de al menos un empate de Elche o Mirandés, supondría el ascenso matemático para el conjunto de Orriols. El sexto en la historia del club. Una derrota, por contra, complicaría las opciones granotas en función de los resultados que se den en esta jornada de transistores. La suerte está echada. Está en manos del fútbol (sigue el partido en directo en as.diariodetocantins.com).
Ni los más optimistas habrían vaticinado que al Levante le podría sobrar una jornada para regresar a la máxima categoría del fútbol español. Ni mucho menos después de todos los contratiempos vividos esta temporada, desde la maldita DANA -ese parón de casi tres semanas, algo inédito durante la temporada, que sacudió mucho más que el calendario- y una crisis económica en la entidad que se llevó por delante a gran parte de la estructura del club. Desde el director deportivo, Felipe Miñambres, el segundo entrenador del primer equipo, Antonio Carmona, e infinidad de trabajadores.
Además, como consecuencia, se tuvo que vender sobre la marcha a dos jugadores vitales como Andrés García y Giorgi Kochorashvili, que apura sus último días como levantinista para devolver al equipo a la categoría en la que debutó con la camiseta azulgrana en 2020. Un ciclo que quiere cerrar con gloria.
En lo puramente deportivo, Calero tiene a los suyos preparados para el partido en El Plantío, a excepción del sancionado Oriol Rey y de Iván Romero, todavía entre algodones. Una casa de la que conoce cada rincón por sus tres exitosas temporadas en Burgos, escenario donde se abrió hueco en los banquillos del fútbol profesional como entrenador principal. Ahora, como su grupo de futbolistas, sueña con la élite.
No se lo pondrá en bandeja el Burgos, su Burgos, y Calero es bien consciente de ello. El no jugarse nada no existe en el código ético de Ramis y mucho menos en el de la ferviente afición burgalesa, que quiere despedir la temporada en su feudo con una alegría. El Plantío estará hasta la bandera y registrará un nuevo lleno esta temporada; en parte, por los cerca de dos mil aficionados del Levante que desean vivir una jornada histórica para su club.
Los de Ramis, por su parte, se despiden de su afición tras una temporada en la que sus seguidores han respaldado incondicionalmente al equipo en los buenos y en los malos momentos. Ofrecer un triunfo y una alegría a los suyos es uno de los objetivos que se han marcado los blanquinegros en su despedida ya que, deportivamente, la única motivación es quedar lo más arriba posible tras una temporada de muchos vaivenes.
El entrenador del Burgos ha anticipado que no va a regalar minutos a nadie y que conformará la mejor alineación posible para retrasar el ascenso de los granotas. Hay varias dudas en la alineación por las bajas de jugadores fijos como Curro y Grego, además de Dani Ojeda. La mayor incógnita es saber quién acompañará a Aitor Córdoba en el centro de la zaga, ya que el defensor murciano ha jugado todos los minutos desde su llegada en el mercado invernal. Se abren varias opciones y todas ellas harán variar otras posiciones. El francés Florian, el serbio Milicic y el colombiano Arroyo son los candidatos para sustituir a Grego.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí
