Ancelotti: “Juzguen mi trabajo, pero que no se me recuerde como una mala persona”
Última rueda de prensa de Ancelotti en Valdebebas
"Gracias, gracias"
Ancelotti se levanta de la silla y se sorprende ante una ola de aplausos. Alza la mano en señal de agradecimiento y se dirige hacia la puerta. La abre y se va. Pero los aplausos aún colean en la sala de prensa, por lo que decide darse la vuelta, asomar la cabeza y entonar un “gracias”. No fue el último. Escasos segundos después, bis. “Gracias, gracias”, ante los aplausos. Y ahí sí, definitivamente, la puerta de Valdebebas se cerró para Ancelotti. Nunca más hablará en la Ciudad Deportiva. Y sólo le queda una última rueda de prensa: mañana, en el Bernabéu. Tras su homenaje. El ciao definitivo.
¿Siente que con su salida, además de la de Modric, se está viviendo el final de una era?
Entiendo que se piense que Modric es de los últimos de una generación dorada, fantástica; aunque todavía queda Carvajal. Pero, como he dicho, es un ciclo que se acaba. Una generación que finaliza. Pero el club no debe construir una nueva, porque hay jugadores jóvenes que están aquí y ya llevan mucho tiempo: Camavinga, Rodrygo, Vinicius... empieza una nueva era y el madridismo no debe preocuparse. Porque este es un club que exige siempre el máximo nivel. El Real Madrid sigue. Se acaba la carrera de Luka Modric aquí, como la mía y como acabó la de Kroos o... puedo nombrar a Casemiro, Cristiano Ronaldo, Benzema, Sergio Ramos o Casillas. Pero el Real Madrid sigue siendo el mejor club del mundo.
Que es más complicado: ¿Ser buen entrenador del Real Madrid o ser buen portavoz?
Ninguna es complicada. Cada entrenador tiene mucha responsabilidad, eso es obvio. Como que el Real Madrid es un club exigente... ¡Pero es que tiene que serlo! Porque su historia no le permite hacer las cosas de otra manera. La exigencia, en este club, es un aspecto fundamental para llegar al éxito. Y explica los éxitos que ha tenido, sobre todo, en este último periodo. La exigencia ha sido la llave para alcanzar el éxito. Yo creo que no es complicado ser entrenador del Real Madrid, como no es complicado manejar este vestuario. Para mí, de hecho, es el más sencillo, porque aquí tienes todas las herramientas para alcanzar el éxito: organización, calidad, un club que es de fútbol... que no es una compañía y que está muy bien manejado por un gran presidente. Así que no es complicado. Es más sencillo ser entrenador aquí, que en otro sitio donde tengas menos calidad y peor organización.
¿Hay alguna decisión en estos seis años a la que siga dándole vueltas? Que le quite el sueño...
No, no. ¡No! (ríe). Sé que he cometido muchos errores, un montón de ellos; pero como he cometido tantos, no te puedo decir cuál es la que más me ha afectado. Pero, de momento, nada me ha quitado el sueño.
Modric, con quien comparte despedida mañana, ha sido el único jugador en no lesionarse esta temporada, además de Fran García y Güler. ¿Qué cree que debe cambiar en el equipo, próximamente, para evitar que las lesiones sean tan protagonistas?
Bueno, no lo sé y no quiero entrar en esto. Como he dicho, el club tiene todas las herramientas para ser competitivo el próximo año, con el nuevo entrenador y puede que nuevos jugadores. Porque este siempre será el objetivo del Real Madrid. Y de Modric... ha sido un ejemplo para todos. ¿Qué más puedo añadir? Para un entrenador es una suerte tener un jugador como él. Porque tiene mucha calidad, sí, pero hay muchos jugadores con mucha calidad en el fútbol moderno. Un montón. Lo que hace distinto a Modric es la capacidad para juntar la calidad, con el alma. Y esto le ha permitido hacer una carrera extraordinaria, ganar muchos títulos y ser una leyenda del Real Madrid. Porque ha sido capaz de combinar la calidad, con el alma. Algo muy importante. Cuando uno es capaz de combinarlas, es una leyenda; cuando no, es un jugador normal.
¿Cómo ha visto la evolución del fútbol en estos últimos años?
El fútbol ha cambiado en estos últimos 12 años (desde que llegó al Real Madrid), como lo ha hecho en los últimos 20. Hacía una cuenta el otro día: gané mi primera Champions en 2003, con el Milan y la última, en 2024 con el Real Madrid. Han pasado 21 años. Y si yo no hubiese sido capaz de adaptarme a los cambios que iba teniendo el fútbol, no habría sido capaz de ganar una Champions tras 20 años. Pero en esto me ha ayudado mucho, obviamente y sobre todo en esta segunda etapa, un cuerpo técnico joven, con entusiasmo, ganas de aprender y que me ha permitido estar actualizado a los tiempos. Porque el fútbol cambia... y cambiará. En estos tiempos la preparación de los partidos es algo mucho más analítico que antes. Ahora miras un partido y debes atender a muchas facetas: balón parado, salida desde atrás, juego en campo rival, presión alta, bloque medio, bloque bajo... hay un montón de aspectos que hace 20 años no se tenían en cuenta. Era mucho más sencillo de preparar una final de Champions en 2003, que en 2024. Pero repito: he tenido un cuerpo técnico que me ha dado este entusiasmo para adaptarme. Ahora soy un entrenador distinto a lo que era en 2003, como a lo que era en 1995, cuando empecé.
Cuando deje Brasil... ¿Le gustaría volver al Madrid? ¿Tal vez, con algún cargo en el club?
Bueno, esto... bufff... me estás preguntando por cosas que no sé (sonríe). Como he dicho, mi relación con el Real Madrid será para siempre y, como he dicho muchas veces, no tengo ganas de entrenar a ningún otro club, o no las tenía, tras el Real Madrid. En el futuro... pues no sé. Pero el futuro inmediato es hacerlo bien con Brasil.
¿Cómo querría ser recordado por el madridismo?
Como un buen entrenador, obviamente. Pero el tiempo lo dirá. No sé... no sé... Mi trabajo puede ser juzgado, no hay ningún problema. Alguno me puede considerar un buen entrenador... ¡Aunque no soy un entrenador, sino una persona que hace el trabajo de entrenador! Pero mi trabajo puede generar una opinión positiva o negativa, no pasa nada. Ahora, no quiero que se me recuerde como una mala persona. Eso no.
En las próximas 48 horas pasará de ser el entrenador del club más campeón del mundo, a serlo de la selección más campeona. ¿Cómo se gestiona este cambio?
Ambas son sensaciones muy bonitas, mucho. Me ilusiona la oportunidad de no traicionar al Real Madrid con otro club e ir a la selección que tiene más historia en el fútbol. Al pentacampeón. Es un gran desafío, pero me encanta esta oportunidad: poder preparar un Mundial con Brasil. Serán días muy bonitos, obviamente. Con muchas emociones.
¿Cuál ha sido su mejor noche en el Bernabéu?
¡Bufff, ha habido muchas, muchas! Es difícil elegir una noche, una tarde, un partido. Muy difícil. Pero obviamente en el recuerdo de todos están las remontadas, porque han sido algo que todavía no se explica. Me quedo, sobre todo, con ellas. Pero después, obviamente, todos los títulos y finales que hemos ganado. Aunque las noches de las remontadas a PSG, Chelsea y City... serán, para siempre, inolvidables.
¿Qué consejo da a los futuros entrenadores del Real Madrid?
El primer cons... No, no, no quiero dar consejos, porque cada uno tiene su idea de fútbol. Lo que sí puedo decir es que es una suerte entrenar al Real Madrid. Y como lo ha sido para aquellos que estuvieron antes de mí, lo será para los que vengan después. Xabi Alonso será el primero y le deseo toda la suerte del mundo, porque es un entrenador que tiene las características para entrenar a este club, este equipo. Que lo disfrute.
Ha conseguido algo inaudito: que un entrenador del Real Madrid sea homenajeado en su último día. ¿Es de lo que más orgulloso se siente?
Sí... sí, sí. Pero el verdadero orgullo es haber tenido la oportunidad de entrenar a este club. De conseguir títulos y entrar en la historia del Real Madrid. Este era el objetivo principal cuando llegué en 2013. No encuentro otra manera posible de despedirme que transmitiendo todo el cariño que siento por este club, mi club. Así como recibiendo el que este club tiene hacia mí.
No se le ha visto llorar en seis años pero... ¿Mañana las emociones pueden florecer más que nunca?
Sí. Genéticamente, yo me emociono muy rápido. Le pasaba a mi abuelo, a mi padre... así que sí, será un día muy emocionante. No esconderé las lágrimas. Si me sale llorar, no habrá ningún problema. Y será un día bonito que compartiré con Modric, quien ha sido un apoyo espectacular en el Real Madrid. Un jugador fantástico; una leyenda. Despedirme con él me parece algo bonito.
¿Cómo ha sido el día de hoy? ¿Y cómo espera la despedida mañana?
Lo de mañana será como debe: una tarde muy bonita. Como he dicho, son días de muchas emociones, en los que hablas con los jugadores y con aquellos que han trabajado contigo todo este tiempo. Con todos. Porque el cuerpo de trabajo aquí es bastante largo. Y he tenido muy buena relación con todos, como hemos sido capaces de crear un muy buen ambiente de trabajo. Y ha sido gracias al esfuerzo de cada uno que trabaja aquí. Sea quien sea. Desde los cocineros... aquellos que me han hecho la carbonara antes de cada partido, hasta quienes han limpiado mi habitación. Son días especiales. Se acaba una temporada que ha sido... larga, como este segundo periodo, porque cuatro años en el Real Madrid son muchos años. Pero lo hemos pasado bien. Todos.
¿Cómo de especial y emotivo será para usted el día de mañana?
Emocionarse será inevitable. Son días especiales: hoy, mi último en Valdebebas y mañana, último partido. Y siempre, cuando se acaba una etapa, una trayectoria, hay mucha emoción. Es lo que me está pasando estos días, ese sentimiento de mucha emoción. Pero no estoy triste, para nada; sino muy contento. Se acaba una etapa muy importante en mi trayectoria... he intentado hacer todo lo posible por este club y lo hemos conseguido, así que nos vamos felices y contentos. Teniendo en cuenta que, antes o después, este día debía llegar. Como he dicho, agradecido por el tiempo pasado aquí, como por todos los que han trabajado conmigo: jugadores, club, presidente, junta directiva... todo este tiempo lo hemos pasado muy bien, lo he pasado muy bien. He sentido mucho cariño, recibido mucha ayuda y me siento afortunado de haber tenido la oportunidad de entrenar a estos espectaculares jugadores. Este periodo se acaba, uno que ha sido bastante largo y que termina bien, de mutuo acuerdo con el club. Como he dicho muchas veces, nunca he discutido con mi presidente y no lo iba a hacer el último día. De momento, todo bien. Y ahora empieza una nueva etapa, una que me genera la misma ilusión y ganas que cuando llegué aquí por primera vez. Así como cuando lo hice por segunda. Ha sido un periodo exitoso, obviamente, hemos ganado mucho; como considero un éxito también el haber aguantado más de 700 ruedas de prensa con vosotros. ¡Es algo que considero un título más (ríe)! No, pero lo que quiero decir es que también lo hemos pasado bien nosotros (en referencia a la prensa). Aunque no penséis que aguantar estas 700 ruedas de prensa ha sido algo tan sencillo. No. Porque las preguntas de algunos de vosotros no siempre han sido... como decirlo... bonitas (sonríe).
¡¡SALE ANCELOTTI!! Comienza su última rueda de prensa en Valdebebas. Su última previa con el Real Madrid. Atmósfera emocionante en la sala.
“¡Buenos días! ¿Qué ha pasado? ¿Se marcha alguien?“, bromea al sentarse.
Hora prevista: 13:00h
Aunque repetimos: ya saben que estas previsiones, en el Real Madrid, son muy volátiles. Y más un día como hoy.
Pero eso se estima dentro del club: Ancelotti hablará en torno a las 13:00h (franja peninsular).
Último entrenamiento
En estos momentos, Ancelotti está dirigiendo su último entrenamiento. Ha protagonizado un corro con sus más cercanos, charlando de forma distendida. Buen ambiente entre los jugadores.
En el apartado de novedades: ha vuelto Vinicius.
Era un secreto a gritos, hasta el punto que Brasil ya lo había anunciado (el 12 de mayo), pero ya es oficial por la parte del club: Ancelotti dice adiós al Real Madrid.
Punto final, tras seis temporadas (dos en su primera etapa y cuatro, en la segunda) y tras ganar 15 títulos, más que nadie.
¡¡Saludos!! ¡Bienvenidos y bienvenidas a Valdebebas!
Ha llegado este día: Ancelotti hablará por última vez en Valdebebas. Es hoy. Está sucediendo. Ya ha dirigido su último entrenamiento y mañana, vivirá su homenaje.
Estas próximas 48 horas apuntan a verdaderamente emocionantes. Ancelotti, seis temporadas después (dos en su primera etapa y cuatro, en la segunda), se despide del Real Madrid.
La comparecencia está prevista en torno a las 13:00h (franja peninsular). Pero ya saben que estos horarios son absolutamente volátiles. Sí, incluso en un día como este.