La hora de Gonzalo
Sin Endrick, el killer del Castilla gana peso. Ya se planeaba ‘probarle’ como verdadera alternativa durante el Mundial.
El vaso de Endrick se vacía, se llena el de Gonzalo García. Porque la lesión del primero es la llave del segundo. El brasileño se fue al suelo en el Pizjuán. En el 56′. Y el resultado, tras pasar por las manos de los galenos blancos, contundente: lesión del tendón conjunto de los isquiotibiales de su pierna derecha. Resumen. Adiós al Mundial de Clubes. Uno más en una enfermería con overbooking. Pero no es uno más. Sin el de Taguatinga, el Madrid pierde a su alternativa en ataque. Al único ‘nueve’ por espíritu de la plantilla. El siguiente en la lista lleva el 7 en el Castilla y el 30 con los mayores. Es la hora de Gonzalo.
Internamente hace tiempo que se barrunta la idea de probar al killer de La Fábrica en Estados Unidos. No como un complemento más, sino como una verdadera alternativa. Como un perfil que, aun con Endrick, no existe en la primera plantilla: un rematador. Un dominador del juego aéreo. Sin ser Joselu, Gonzalo ha demostrado virtudes que, en el club, entienden que pueden ajustarse a determinados contextos. No solo en el Castilla, con sus 25 zarpazos, también con Ancelotti. La intención es que, con Xabi, se vaya de exámenes a la tierra de las oportunidades.
Sus apariciones con los mayores han sido nimias, pero contundentes. Apenas 48 minutos. Suficiente para ponerse la capa en Butarque y ser decisivo en el Pizjuán. Contra el Leganés, con un testarazo que fue el billete a semis de Copa. Frente al Sevilla, también con la cabeza, con un servicio quirúrgico para que Bellingham enjaulase la victoria. Un gol y una asistencia. En situaciones de área. Donde su instinto le pide estar. “Le había dicho a Brahim en la jugada anterior que me la pusiera en el área, que iba a estar ahí...“, dijo tras ser el héroe ante el Lega. Y ahí estuvo.
Sin ser un ‘delantero-objetivo’ al uso, su capacidad para serlo es la rendija al primer equipo. No es excesivamente alto (1,82m). En cambio, tiene un estupendo timing y un gran salto, cortesía de un trabajado tren inferior. Gonzalo lleva más de 150 goles en La Fábrica y domina todos los artes. Para muestra, esta temporada. De los 25 que le convierten en pichichi de bronce, cinco tantos con la izquierda, 15 con la derecha (seis penaltis) y cinco de cabeza. La última cifra, medalla de plata en una categoría, Primera RFEF, que ha dominado por tierra y aire.
Solicitado
Una coctelera que ha hecho a muchos equipos apuntar su nombre en su lista de objetivos. Varios clubes de Primera tienen en mente realizar un acercamiento formal, más allá de los múltiples intereses que han llegado a sus oídos. También desde la Premier es un nombre recurrente en las conversaciones entre scouts de cara al mercado venidero. Será un mercado animado en Valdebebas. Por Gonzalo... y por el resto de joyas cuyo cartel atrae a postores, como cada año.
Reto o sueño
Y para Golzalo llegará el momento de tener valorar entre esa disyuntiva. Salir para tratar de comprar su vuelta con rendimiento en la élite, como Nico Paz en el Como, o seguir una temporada más en el Madrid. Aunque ese último extremo dependerá del plan, del proyecto que tenga Xabi para con él después del Mundial.
Y en el horizonte venidero, otra duda. Si podrá tratar de superar los 25 goles de Mariano en una temporada en el Castilla o no (el récord sin contar playoff, añadiéndolos a la ecuación el techo es de 27). Porque el Castilla visita el Alcoyano el sábado, apenas horas después del duelo del primer equipo contra la Real. Reto o sueño. Sea como fuere, su hora se acerca.
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