Cissé, una continuidad muy difícil
El canterano guineano, cuarto pepinero con más minutos en Liga la pasada campaña, apunta a una salida. Termina contrato en 2026 y es momento de un cambio de etapa. El club, con poco margen para retenerlo o sacar mucho por él.
El futuro de Seydouba Cissé (Guinea, 24 años) apunta lejos del Leganés. El canterano termina contrato en 2026 y, pese a su enorme vínculo con el club y la ciudad (acabó roto en lágrimas con el descenso a Segunda), lo normal es que abandone la entidad pepinera después de haber quemado una etapa importante de su vida y su carrera. Está por ver qué ocurre en el mercado, pero el caso ahora está enfocado más al adiós que una continuidad complicada.
Esa posible despedida no estaría mal vista por Blue Crow Sports, dueños del club, especialmente con el fin de hacer caja para afrontar la perdida de la categoría. Ya en el verano de 2023 se barajó la opción de intentar generar ingresos con una hipotética marcha, pero fue entonces el propio jugador quien no quiso dejar Butarque.
Entendía que no era el momento para jugar en Primera (aunque ya tenía algún interés en firme) y menos de abandonar al Lega tras una campaña en la que se rozó el descenso a Primera RFEF. Sus goles en Burgos fueron los que salvaron matemáticamente al equipo. “Yo quiero jugar en Primera, pero con el Leganés”, decía entonces. Lo consiguió.
La última renovación, en 2022
Aunque el club afirme tener una situación económica envidiable, ahora está más necesitado de ingresos con la caída a Segunda que en Primera. Cissé tiene una cláusula de 20 millones de euros, pero el hecho de terminar contrato en apenas una campaña abarata su coste. Es ley del mercado.
El futbolista renovó a principios de 2022, todavía con el mando de los Moreno – Pavón, y desde la llegada de la nueva propiedad, no ha contado con oferta alguna para ampliar su vinculación o mejorar sus condiciones. Forma parte de la política de este holding estadounidense firme con evitar los contratos largos en sus jugadores. Según su criterio, puede lastrar la flexibilidad estratégica de la entidad… aunque también implique el riesgo de perder potenciales ingresos por la venta de sus activos. Podría ser este caso para un jugador que, además, representa uno de los contratos más bajos de la plantilla. Lo era en Segunda. Más aún en Primera.
Un fijo en la vuelta a Primera
Cissé, canterano fichado por Jorge Broto, responsable de cantera, y eclosionado en la categoría de plata (estalló en 2021 de la mano de Mehdi Nafti), ha pasado de ser un futbolista con recorrido discreto en la campaña del ascenso (Borja Jiménez no contó tanto con él, sólo jugó 1.338 minutos en Liga) a ser uno de los intocables en la plantilla, con 2.451 minutos en Primera. El cuarto pepinero que más ha jugado este curso sólo por detrás de Sergio, Dmitrovic y Rosier.
Ante ese panorama, queda claro que Cissé está en el punto álgido de su carrera. Listo para seguir entre los mejores. Regresar a Segunda sería, para su evolución, un paso atrás, más para continuar en un club que no le ha mostrado interés en renovar en una falta de cariño institucional (diferente al cariño del público) que no ayuda a ese hipotético sacrificio de continuar.
Sin oferta en firme de ningún equipo, Cissé cuenta con equipos de Alemania, Francia y España (entre ellos, el Getafe) interesados en hacerse con sus servicios. El deseo del futbolista es intentar continuar en LaLiga, donde el fútbol se asemeja más al de sus virtudes.
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