Tijeretazo salarial de Huijsen por ir al Madrid
Como bien avanza la BBC, el defensa perderá una gran suma de dinero en su fichaje por el Real Madrid. José Ángel Sánchez y Juni Calafat, claves en la operación.
Dean Huijsen (Ámsterdam, 2005) es una realidad. A falta de oficialidad, el zaguero del Bournemouth será nuevo jugador del Real Madrid de cara al Mundial de Clubes. Como bien avanza la BBC, el diestro ha hecho oídos sordos a todas las ofertas de la Premier para cumplir su sueño de jugar en el Bernabéu. La misma información comenta que “cobrará 9 millones brutos en un contrato de cinco años, pero se esperan que suban a los 11 millones brutos en su último año, según rendimiento”. Se espera que pase reconocimiento médico y firme su contrato, hasta 2030, el próximo jueves.
La misma fuente indica que la Premier quería cubrir en oro al hispano-neerlandés. Sin embargo, el trabajo realizado por José Ángel Sánchez, CEO del club, y Juni Calafat, Chief International Scout, terminó por convencer al futbolista y a su entorno, representado por Ali Barat y su padre, Donny Huijsen. “Ganaron la carrera a clubes como Chelsea, Liverpool, Manchester United y Arsenal, en la Premier League, y se sabe que el Bayern de Múnich también estaba interesado”, reza el artículo. Un golpe sobre la mesa para cerrar un fichaje soñado.
Dean Huijsen será la cabeza visible del proyecto defensivo blanco en los próximos años. Un futbolista sobre el que cimentar la zaga del Madrid de la década venidera. La incorporación de Dean era algo capital. Objetivo primario, como ha venido informando este periódico, desde hace tiempo.
Antes incluso de la llegada de Xabi Alonso como nuevo técnico. No obstante, en cuanto se puso su nombre sobre la mesa del tolosarra, no tardó en dar luz verde. Empezando por su papel importante en el venidero Mundial de Clubes. Y es que, como informó AS, “Xabi habló con Huijsen por teléfono y cree que encajara en su estilo de juego expansivo y progresivo”.
Un fichaje, el de Dean, que se ve internamente como una victoria similar a la lograda con Jude Bellingham. Un contexto sinónimo al del inglés, a quien también perseguía la nobleza de la Premier en 2023. Pero primó su deseo. Como con Huijsen.
Una operación a fuego lento
La llegada de Huijsen a Chamartín ha sido un fichaje en diferido. Como ya avanzara este diario, el Madrid intentó captarle para La Fábrica cuando apenas contaba con 16 años. El club incluso le invitó a un tour por las instalaciones deportivas del equipo junto a su familia, encabezada por su padre, Donnny, antes de dar el salto a la Juventus. En aquel momento, la familia apostó por la vecchia signora, entendiendo que el camino al estrellato sería más corto.
En Turín no tuvo el recorrido esperado, aunque llegó a estrenarse con el primer equipo y a llevarse los halagos de Allegri. Pero ese debut no vino acompañado de más confianza. Ahí apareció la Roma y José Mourinho. Aconsejado por Tiago Pinto, por entonces director deportivo romano y ahora en el Bournemouth, pidieron la cesión de Dean.
En la capital italiana comenzó a sacar brillo a su talento, demostrando potencial diferencial. Y al final de ese curso apareció la oferta ‘cherrie’. Con Iraola en el banquillo, el zaguero explotó a unos niveles que “ni los Cherries esperaban”; inicialmente iba a ser el relevo de Marcos Senesi, pero su rápida adaptación terminó por echar la puerta abajo de la titularidad, tanto en el Vitality Stadium como en La Roja. El camino ha sido arduo, pero Huijsen ya es merengue.
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