El miura volvió a ser demasiado
El equipo rojiblanco, que jugó varios minutos en superioridad numérica, cae por 2-1 en Salzburgo. La embestida final no fue suficiente.

Adiós al sueño del Atlético. El Salzburgo se volvió a cruzar en su camino, como en la final four de 2022 (única en la historia rojiblanca) y ni la superioridad numérica durante 25 minutos hasta la expulsión de David, con penalti incluido, fue suficiente para imponerse a un equipo tremendamente físico.
Ni Rayane, Julio ni Boñar, el único de la actual plantilla que comparte generación con la de 2022, aunque sin minutos en las semifinales donde el Salzburgo se clasificó goleando por 5-0 al equipo de Torres y Pablo Barrios, bajaron desde el filial colchonero. Luis Bueno sí contó con la presencia de Omar Janneh y Jano Montserrate, muy encorsetados por la presión austriaca.
RESUMEN
Atlético de Madrid Juvenil A: Esquivel; Arza (Sergio Esteban, 66’), Almeida, Pablo Pan (Diego Pérez, 81’), Daniel Muñoz; Castillo, David Fernández, Jano Monserrate; Romeo Hueso (Gross, 88’), Omar Janneh y Rajado (Taufyk, 81’).
Árbitro: Jakob Sundberg (Dinamarca). Roja por doble amarilla a Traoré (16’ y 35’) y a David Fernández (7’ y 61’). Amonestó con tarjeta amarilla al entrenador local, Beichner (19’), a Mellberg (58’), Trummer (89’), Brandtner, (91’); y al rojiblanco Esquivel (62’).
GOLES: 1-0. 56’ Baidoo. 2-0. 62’ Sulzbacher, de penalti. 2-1. 66’ Romeo Hueso empalma a la red un centro de Daniel Muñoz.
El Salzburgo demostraba pronto su fortaleza física y pulmones para subir líneas en campo rival. Embotellaba al Atleti y obligaba a Esquivel a jugar en largo. Una gran noticia volver a ver al portero bajo palos tras sufrir la temporada pasada una arritmia y una rotura de ligamento cruzado. Los rojiblancos no encontraban vías de salida y se salvaban de un penalti clarísimo cometido por Pablo Pan cuando Adejenughure se disponía a empujarla a la red.
Pero antes del descanso se hizo la luz. Una fea patada de Traoré a Castillo se convertía en su segunda amarilla y dejaba al Salzburgo en inferioridad numérica a los 35 minutos. Pero las piernas austriacas eran suficientes para abarcar campo en inferioridad. Y Baidoo fue el más rápido para hacer el 1-0 cuando el Atlético continuaba sin sentirse cómodo sobre el verde. Una losa aumentada minutos después por el penalti y segunda amarilla para David Fernández. Un grave error, el 2-0, igualdad numérica y una losa que parecía definitiva.
Pero ahí sí apareció un Atlético con corazón. Se metió en el partido con un golazo de Romeo Hueso, una de sus grandes promesas, e incluso acabó apretando en busca de un empate que merodeó Gross y especialmente David Muñoz de falta directa. Pero el arreón final fue insuficiente. El Salzburgo seguía en pie, había vuelto a tumbar al Atlético. En los cuartos le espera el vencedor de la eliminatoria entre Sturm Graz y Olympiacos.
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