Unas vacas abandonadas en una isla desierta en medio del océano hace 150 años desarrollan una singular historia evolutiva con un final inquietante
Tras ser abandonada por unos colonos, una rara raza de ganado salvaje floreció en una remota isla del océano Índico meridional.
Durante más de un siglo, una remota isla del océano Índico meridional fue el hogar de una rara raza de ganado salvaje, hasta que los animales fueron sacrificados de forma controvertida.
Se cree que la población bovina más próxima genéticamente a la raza Jersey prosperó en la isla de Ámsterdam, un territorio francés situado a unas 900 millas de la tierra más cercana, después de que un pequeño número de reses fundadoras fueran abandonadas allí por colonos a finales del siglo XIX.
Qué hay que saber sobre la isla de Ámsterdam
La isla de Ámsterdam es un lugar azotado por el viento en el que “solo hay vegetación escasa”, según la descripción del blog especializado en fauna Les Biodiversitaires.
Es una de las numerosas islas que componen las Tierras Australes y Antárticas sas (TAAF), en una zona que experimenta “un clima cambiante, importantes precipitaciones y temperaturas que oscilan entre los -5 °C y los 20 °C”, explica la Asociación de Países y Territorios de Ultramar.
No bicycles here! Amsterdam Island is a French island in the southern Indian Ocean. Dutch captain Anthonie van Diemen named it after his ship on 17 June 1633. The population consists of only 28 scientists and a lot of seals.🇫🇷 pic.twitter.com/48012ZS7ZM
— Klaas Meijer (@klaasm67) May 31, 2019
¿Cómo llegó el ganado a la isla de Ámsterdam?
Según varios relatos, el ganado de la isla de Ámsterdam llegó en grupos de cinco o seis animales en torno a 1870, traído a la isla por un granjero y su familia.
Se llamaba Heurtin y procedía de otra isla sa, Reunión, situada en el océano Índico, a unos 1.700 kilómetros al oeste. Pero solo unos meses después de llegar, el granjero y su familia abandonaron sus intentos de asentarse allí, volvieron a Reunión y abandonaron el ganado a su suerte.
“Se vieron obligados [los colonos] a regresar a Reunión por las difíciles condiciones climáticas, los problemas de adaptación y el aislamiento, dejando atrás al ganado”, se lee en un artículo de la revista Futura, escrito por un equipo de expertos dirigido por Laurence Flori, directora de investigación del centro de investigación ganadera Umr Selmet. Sin embargo, aunque Heurtin y su familia no pudieron establecerse en la isla de Amsterdam, parece que el ganado tuvo menos problemas para adaptarse al entorno.
La población de ganado crece y crece
Según Futura, fueron los aparentes vínculos genéticos con el ganado de Jersey, una raza británica, los que resultaron ser un factor importante para la supervivencia sin supervisión de la población. Los autores del artículo afirman que las condiciones de Jersey, isla situada en el Canal de la Mancha, entre el Reino Unido y Francia, son “relativamente similares a las de la isla de Ámsterdam”.
Además, el ganado parece haber evitado las dañinas mutaciones genéticas que suelen asociarse a la endogamia, señalan los investigadores. Según un estudio de D. Berteaux y T. Micol, del Centre d’Etudes Biologiques de Chizé, a finales del siglo XX la población de ganado de la isla de Ámsterdam rondaba los 2.000 ejemplares.
Berteaux y Micol describen el ganado de la isla como “de cuerpo pequeño”, con “cuernos de longitud media y [pelaje] de colores muy variados”. Según los científicos, sobrevivió sin “alimentación suplementaria, suplementos minerales ni atención veterinaria de urgencia”. Berteaux y Micol añaden que el ganado puede haberse beneficiado de “adaptaciones inusuales, sobre todo en lo que respecta a la economía del agua”. Pero surgió un problema: el pastoreo de los animales les llevó a convertirse en una gran amenaza para el ecosistema de la isla de Ámsterdam.
¿Qué especies se vieron amenazadas por el ganado?
En particular, el ganado empezó a invadir el territorio de cría del albatros de Ámsterdam, una especie de ave que solo se encuentra en la isla. (En 2019, la población de aves de la isla contribuyó a su inclusión en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO).
El pastoreo excesivo también había puesto en peligro de extinción al arbusto Phylica arborea, por lo que los es del TAAF optaron inicialmente por llevar a las vacas en una sección vallada de la isla. “Se retiró el ganado de la mayor parte, lo que permitió rehabilitar el ecosistema terrestre”, afirman Berteaux y Micol. Sin embargo, a principios del siglo XXI se tomó la decisión de sacrificar la población por completo.
Los opositores critican el «precipitado» sacrificio
Aunque el equipo de expertos que ha elaborado el documento no parece discutir la necesidad de “salvaguardar las especies salvajes endémicas” de la isla de Ámsterdam, califica de “precipitada” la erradicación del ganado, alegando la “importancia ecológica y evolutiva de esta población bovina única”.
Señalan que el sacrificio se llevó a cabo a pesar de las peticiones enviadas a los es del TAAF y de las quejas presentadas en el Parlamento francés. Les Biodiversitaires, por su parte, califican el sacrificio de “escándalo”.
Sugiriendo que es irónico que tuviera lugar en 2010 (el Año Internacional de la Biodiversidad) el blog dijo en 2011: “He aquí una población bovina, genéticamente aislada desde hace 140 años, que vive en condiciones climáticas extremas, con su propio patrimonio genético, que es sacrificada como si fuera caza común”.
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