Se sumergen en un barco hundido de la Segunda Guerra Mundial en 1942 y encuentran una reliquia ‘sorpresa’ en el garaje
El automóvil lleva sumergido en el océano Pacífico desde 1942. Se desconocen las razones exactas por las que el automóvil se encontraba en el interior del barco.
Los investigadores se han topado con un descubrimiento asombroso, un automóvil en los restos de un barco estadounidense que se hundió durante la Segunda Guerra Mundial. El 19 de abril, un grupo de científicos de la istración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) estaban utilizando un vehículo submarino operado mediante control remoto para explorar el USS Yorktown cuando detectaron la tenue silueta de un automóvil en la cubierta del hangar de popa del barco. Una vez fue encontrado, los investigadores regresaron al día siguiente y a través de un análisis exhaustivo del guardabarros, parabrisas y capota, se percataron de que se trataba de un Ford Super Deluxe.
El vehículo estuvo presente en la Batalla de Midway
Un portaaviones de la Armada de Estados Unidos de 809 pies de largo, ha estado sumergido en el océano Pacífico desde 1942, que fue derribado por las tropas japonesas en el enfrentamiento durante la histórica Batalla de Midway. Antes de que el capitán del buque, Elliott Buckmaster diera la orden de abandonar el barco, la tripulación desalojó el barco de toda la carga pesada, entre la que se encontraban varias cajas de munición y armas, con el objetivo de mantener el barco a flote, según dijo un portavoz de la NOAA a McClatchy News.
Por ahora, se desconocen las razones exactas por las que el automóvil se encontraba en el interior del barco y los investigadores solo pueden señalar algunas conjeturas. Cabe la posibilidad de que el vehículo fuera utilizado por algunos de los rangos oficiales de la embarcación, como podían ser el mismo Buckmaster o el contralmirante Frank Fletcher a la hora de realizar operaciones en puertos extranjeros. Por otro lado, también indican que el vehículo pudo ser colocado ahí tras los daños sufridos en la Batalla del Mar del Coral, con el objetivo de llevar a cabo algunas reparaciones.
El barco escondía algunos secretos
Además de toparse con el vehículo sorpresa, los investigadores también pudieron observar como había un mural pintado a mano en el interior de uno de los huecos del ascensor. El mural mostraba todos los lugares que la embarcación visitó hasta el día de su hundimiento.
El equipo de investigación también encontró tres aviones de combate en el interior del buque y uno de ellos aún seguía cargado con una bomba. Estos aviones fueron empleados por las tropas estadounidenses en la Segunda Guerra Mundial para realizar operaciones de reconocimiento.
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