Javier Ruiz señala las tres industrias que Trump quiere apropiarse con los aranceles
El periodista y jefe de Economía de Cadena Ser habla con AS y señala cómo perjudicará a EEUU la política arancelaria de su presidente.


Estados Unidos, país que históricamente se ha involucrado en varios y diversos conflictos, marcará el 2025 como que más enemigos tuvo: prácticamente todos los países del mundo. Donald Trump ha impuesto aranceles de exportación a 185 naciones del globo. La guerra es comercial, sí, pero como una guerra corriente, se mide en grados de derrota. Gana quien pierde menos, pero incluso el que vence acaba perdiendo algo.
Javier Ruiz, periodista y jefe de Economía en Cadena SER, cree que Trump ha abierto “una política suicida del ojo por ojo en la que todo el mundo queda tuerto”. Las potencias mundiales jugarán una larga partida de ajedrez con un ojo tapado, sin saber diferenciar entre rivales y aliados y mirando de reojo a sus históricos amigos. El periodista habla con Diario AS sobre las principales consecuencias de la política proteccionista arancelaria de Estados Unidos.
¿Pregunta: ¿Sale alguien ganando en esta política arancelaria?
Respuesta: No, con los aranceles no sale ganando nadie. Una guerra arancelaria es como una guerra normal, se miden en grados de derrota. De momento, los más derrotados son México y Canadá, probablemente China, pero el propio Estados Unidos va a salir perdiendo. Lo que tenemos ahora son distintos grados de derrota, pero ganadores de la guerra arancelaria, no va a haber ninguno.
P: ¿Qué hay detrás de los aranceles? ¿Qué pretende EEUU?
R: Esto es puro nacionalismo económico, político. Es una forma de traer a tu país industrias que has perdido, en las que eres menos competitivo, pero es una medida absurda, es atornillar algo a cañonazos. Las subidas de aranceles no generan empleo, solo subidas de precio. Las subidas de aranceles generan paro. Los economistas están como estaban los científicos en la COVID, cuando Trump recomendaba beber lejía. Pues lo mismo pero en materia económica.
P: ¿Tiene EEUU la capacidad para sustituir con producto nacional todas sus exportaciones?
R: En absoluto. De hecho, una parte de esta política se basa en crear una mejor capacidad de negociación para EEUU. Hay tres cosas que EEUU quiere quedarse: nuestros coches, las farmacéuticas suizas —en Suiza hay una enorme farmacia— y los semiconductores de Taiwán. Por eso hace esta guerra arancelaria, para quedarse con esas tres cosas.
“Los economistas están como estaban los científicos en la COVID, cuando Trump recomendaba beber lejía. Pues lo mismo pero en materia económica”
Javier Ruiz
P: Trump se coloca ahora en una posición de poder en la mesa de negociaciones
R: Clarísimamente.
P: Pero, ¿cómo afectará a los estadounidenses?
R: Van a subir de precio tres cosas. Hoy ya sube el precio de los coches, entre 3.000 y 12.000 dólares por vehículo. Lo segundo que va a subir son las tecnologías, la electrónica: televisores, tablets, iPhone… ¿Por qué? Porque China ensambla el 48% de los productos electrónicos que se venden por el mundo, desde los teléfonos hasta los televisores. Y a China le han puesto el 54% de aranceles. Por último, subirá el precio de la ropa, porque se cose en India y en China, y a los dos países les ha puesto aranceles monstruosos.
P: ¿Y la ropa deportiva?
R: Las zapatillas de deporte, Nike y Adidas, se fabrican fundamentalmente en Vietnam, Indonesia e India. Las zapatillas van a encarecerse de precio, Adidas ha perdido un 9% en bolsa. Todo lo que se hace viene de dos o tres sitios. Los derechos deportivos y de imagen se revisarán a partir de noviembre, pero ahora mismo, los efectos de los aranceles se sentirán en la ropa y zapatillas deportivas.
“Hemos abierto una política suicida del ojo por ojo en la que todo el mundo queda tuerto”
Javier Ruiz
P: ¿Cómo crees que va a responder la Unión Europea?
R: Lo de EEUU es una declaración de guerra. La respuesta de la UE es una guerra, ya no es una declaración, y responderá con la misma moneda, es decir, con más aranceles. Castigará y encarecerá los productos americanos. Hemos abierto una política suicida del ojo por ojo en la que todo el mundo queda tuerto.
P: Sánchez ha dicho que las puertas al diálogo siguen abiertas.
R: Hay algo que todo el mundo espera, que Trump utilizase esto como una táctica negociadora, pero ya ha demostrado que no, que se trata de una guerra mundial. Le ha puesto aranceles a todo el planeta. Hay gente que piensa que todavía se puede arreglar esto. El mejor escenario posible es que el daño sea menor de lo esperado, pero da igual que haya o no diálogo, va a haber daño sí o sí, y eso es lo que discutimos ahora, cuánto daño va a hacer a la economía mundial. Pero, por supuesto, hay que dialogar e intentar bajar los aranceles.
P: ¿Qué daño hará a los españoles?
R: España está un poco mejor que los demás porque no exporta tanto a EEUU. Solo en 4,8% de nuestras exportaciones van a Estados Unidos, y el 75% a la Unión Europea. Sentiremos menos daño que los demás, pero vamos a ser más pobres porque vamos a pagar más caro todo y porque habrá menos crecimiento. La estimación de crecimiento para España de Cámaras de Comercia es de 0,2% menos. Nos hará menos daño, sí, pero nos hará daño.
“Vamos a ser más pobres porque vamos a pagar más caro todo”
Javier Ruiz
P: Pero, los precios que no tengan nada que ver con EEUU, ¿también se encarecerán?
R: Es probable que sí y que se produzca un efecto dominó. Las pendientes inflacionistas no acaban en una lista de tres productos, la economía ahora se vuelve compleja. Por ejemplo, los airbags de los coches se fabrican en Alemania, pero el cuero se hace en la India. Hay muchos caminos por los que la economía filtra el daño. Esto no ha hecho más que comenzar, o se negocia una tregua, o esto es un desastre.
P: ¿Europa empezará a ver con buenos ojos el mercado asiático?
R: Ya lleva tiempo mirándolo. Sánchez ha visitado China varias veces, ha explorado este mercado varias veces. EEUU está intentando frenar a China, pero está alimentando a China. El ejemplo claro lo tenemos en Venezuela. EEUU prohíbe a España explotar los yacimientos de petróleo de Venezuela. ¿Quién va a explotar Venezuela si no son los aliados de EEUU? Pues una empresa china que se llama Sinopec que es la única que tiene capacidad para eso. Trump intenta frenar a China y no se da cuenta de que le entrega bazas. Me da la sensación de que España y Europa ya han mirado esos mercados, pero tenemos productos en EEUU que no se pueden sustituir fácilmente en Asia. Por ejemplo, el aceite de oliva, no lo puedes vender como lo vendías en EEUU porque necesitas un cliente más rico y más sano, y eso no lo tienes en China ahora mismo. Hay mercados que sí van a poder virar, y otros que no.
“Trump intenta frenar a China y no se da cuenta de que le entrega bazas”
Javier Ruiz
P: Parece obvio que EEUU se hará daño. Entonces, ¿por qué comienza una guerra comercial?
R: Creo que esto es, literalmente, como estaban los científicos cuando Trump decía que para curarse de COVID había que beber lejía. Los científicos decían ‘no’, pero Trump insistía. Los economistas están sufriendo el efecto lejía. Dicho esto, hay quien piensa tesis más perversas: a EEUU le preocupa poco la economía porque le preocupa su mandato. Quiere sus tres años de autoabastecimiento para traerse ciertas industrias y, en su tercer o cuarto año, declarar una guerra y perpetuarse en el poder. Escucho esa tesis y me preocupa, pero no tengo nada con lo que sostenerla, así que la enmarco en la ciencia ficción de la política. Insisto, estamos en el efecto lejía, cuando a los científicos les decían ‘beban lejía que eso cura la COVID’.
P: ¿Vendrán más aranceles?
R: Por supuesto. Trump ha anunciado otra batería de aranceles en noviembre a productos farmacéuticos específicos, a la madera y otras materias primas. Esto no ha hecho más que empezar, estamos ante un asalto que nos lleva a la economía de 1880, hemos retrocedido dos siglos con Donald Trump.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí
Rellene su nombre y apellidos para comentar
Tu opinión se publicará con nombres y apellidos